Enero es el mes por excelencia para la Paz, y es cuando la Hermandad de la Anunciación de Jesús Resucitado, Santa María Magdalena y María Stma de la Paz celebra los cultos en honor a su imagen titular. La Santísima Virgen fue expuesta durante los tres días de este fin de semana en un exquisito altar de cultos en el que podíamos observar la restauración que han sufrido los varales del palio para la próxima Semana Santa.
Como bajada del reino celeste, la Reina de la Paz lucía esplendorosa cual sol que baja al atardecer para encontrarse con sus fieles; de blanco inmaculado y brindando la mano a cuantos fieles se quisieron acercar a ella. Otro de los estrenos, un manto del color de las azucenas que quiso arropar con amor ferviente a nuestra Madre en el día de su onomástica.
En la tarde del sábado, segundo día de triduo en que la Hermandad lo dedicó a los jóvenes de la cofradía, el Coro San Roque de la vecina localidad de Torredonjimeno amenizó la sabatina y quiso poner un toque de gloria a aquella celebración litúrgica. Y en cuanto al domingo, la Stma Virgen permaneció en devoto besamanos durante todo el día para sus devotos, cuya petición no era más simple que la advocación que alberga su nombre: Paz para un mundo de guerras y caídas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentad con respeto y humildad. La bondad nos puede hacer grandes.